DIA 3

Tras despedazar en mil pedazos y mil circuitos a la pantalla de ordenador recien encontrada cerca de mi casa separe la chatarra de lo que seria la pantalla y visto lo que tenia y lo que queria hacer vi que no tenia suficientes microchips y resistencias. Bueno, voy a tentar a la suerte y a ver si encuentro más chatarra cerca de mi casa.

Igualmente debia seguir con mi plan para el trabajo y gracias Josep Madaula, que se encarga de poner la nota a esto, conocí a el profesor Antonio, que es el encargado del taller de forja y que me ayudaria a situar fijamente a la malla la recien encontrada televisión.

Antonio me explica diversas posibilidades y me hizo un tour guiado por el taller enseñandome diferentes instrumentos y ejemplos de trabajos anteriores (que no tienen nada que ver con este). Me quedé convencido de que aqui podia conseguir algo y estaba contento de como avanzaba.

Me situe con mis herramientas y mi pantalla recuperada en una mesa de trabajo y le comente que mi primer objetivo era abrir la televisión. Rapidamente Antonio tenia ya en la mano una radial funcionado y al cabo de pocos segundos estaba saltando chispas al cristal de la pantalla.

A cada golpe de radial el corte era más profundo, pero más basto y conforme avanzanba el corte cada vez estaba más feo y costaba de cortar, segun Antonio que lo vivia en sus carnes. Al rato una grieta aparecio y al rato, la desgracia entro en escena y partio en 7 trozos la televisión.

Ahora tenia una pantalla a trozos. Estupendo. Que fastidio, no sabia que hacer, ademas era la hora de recojer y Antonio ya me estaba echando por la puerta.

Recogí mis trozos rotos y me volví a casa. Una siesta me ayudará a pensar, o al menos eso espero.

Y si, funciono, se me ocurrio la idea casi definitiva, digo casi porque ya tenia por supuesto de que algo ocurriria en mis multiples sesiones de taller de forja.

Pense que, ahora que tenia un pantalla en trozos y queria representar en mi origen un bombardeo de anuncios, ¿Porque no retomar esto y hacerlo posible? Asi fue que se me ocurrio el concepto de explosión por la sobresaturación de anuncios. Por un bombardeo mediatico la televisión alcanza su capacidad maximo y explota en varios pedazos.

Muy bien, ya tenia retomado el trabajo y ahora tocaba mover ficha. Ahora lo que tocaba era localizar a un experto en vidrios que me ayudara a reconstrir mi recien malherida pantalla de ordenador.