DIA 2

Estaba bien convencido de que la idea que tenia era muy buena, al menos para mi, (después que los profesores la acepten es otra historia...) pero veía que era demasiado grande para mi. Mucho dinero hacer que una tele funcione y que este encajada en la estructura que nos proporcionaron como soporte.

Era la hora de asumir de que debía sacarle más zumo al tema.

Me quede con la idea de contenedor en forma de televisión con las marcas en su interior, proyectándose. Pensé que tal vez, con los contactos que tengo en mi antigua universidad conseguiría un cañón de luz para que me lo prestase para hacer el trabajo y me dispuse a indagar por Internet para ver que me podía proporcionar.

Al poco tiempo di con que gracias al Papercraft podría conseguir una especie de televisión de papel la cual me serviría como pantalla para el cañón de luz.

Indague con Google y no me dio solución así que recurrí a un foro especializado en estos temas. Me dirigí a 4chan.org/po/ donde gente de todo el mundo discute y realiza cosas sobre el tema. Deje un tema comentando mi problema y en aproximadamente en 2 minutos tenia ya 2 planos para recortar y pegar y crear una televisión. Como es la gente que vive en Internet.

Con los planos y algunas ideas claras me dispuse a plantear a los profesores lo que se me había ocurrido.

Se lo cuento, les explico mi idea de que “No somos lo que comemos” como siempre se dice, sino que “Somos lo que vemos” lo que nos venden en los medios de comunicación y que me gustaría reflejarlo en un estomago hecho a partir de una televisión. Y que lo brazos serian microchips y circuitos.

Miradas raras, aunque continuo con la explicación. Les explico que quiero hacer una proyección de anuncios en la televisión y que así reflejaría las marcas y con el montaje que yo diseñaría se vería claramente que seria un bombardeo continuo de imágenes de logotipos.

Más miradas raras y les comento que buscando en Internet, gente anónima me ayudo a proporcionarme televisiones artificiales que me servirían de pantalla y aquí ya si que todo el mundo alucina y piensa que estoy loco.

Para empezar los profesores piensan que a lo mejor me estoy complicando demasiado y que los brazos llenos de circuitos distraen de la idea que se quiere representar, eso me convence y pienso que tal vez debería substituir los circuitos por envases vacios de cosas y en ese momento de reflexión interior que hago mientras los demás me hablan escucho que Laia, una compañera de clase, me comenta que a lo mejor, si me parecía bien, en vez de proyectar las imágenes como si fuera una televisión real lo que debería hacer es rellenar la televisión con envases vacíos.

Es raro, pero me pareció bien. Normalmente soy muy cabezón con mis ideas y no me dejo “torear” pero el hecho de representar a la televisión como un contenedor donde se arrojan alimentos es interesante. El hecho de que esto sea una especia de paralelismo lejano con el estomago real me acabo de convencer y el hecho de que a los profesores, antes esta nueva propuesta, no pusieron las cejas entre curvadas me hizo buscar chatarra para empezar el proyecto de todas todas.

Salí de clase en busca de chatarra interesante, en concreto una televisión pequeña e interesante. Lo primero que se me ocurrió fue acercarme a la biblioteca de La Massana para que, gracia a Internet, localizar la chatarrería más cercana y empezar así la búsqueda. La primera que me apareció en la herramienta Google.maps fue “Ferralles Serra Scp” y tras unos cuantos clicks más localicé el teléfono y me dispuse a llamar.

Mal asunto, Google decía que estaban en la calle Villaroel pero les llame directamente para preguntar precios y posibilidades pero antes de todo me comentaron que que se habían movido desde hace más de 2 años a Montornés del Vallés. Me queda lejos.

Al rato le di a la cabeza y me pregunte ¿Donde se recoje la chatarra normalmente? En el “Punt verd” me dijo una voz interior. Y así es que localicé mi Punt verd más cercano a mi casa (y casualmente a la universidad) y fui a preguntar.

Había cola ya que la gente, al parecer, tenia cosas que tirar y vi desde una rejilla que tienen que si, que ahí estaba la televisión perfecta que seria parte de mi proyecto. ¡Bien! Exclamé en mi interior, pero al evadirse la cola y hablar con la persona responsable que estaba allí y tras comentarle mi situación y mis necesidades me comentó que no, que no podía ser ya que se ve que hay gente que síndrome de Diogenés que se dedica a acumular esa basura en su casa y que por eso no me podían dar nada por norma.

Si, me acababan de llamar loco y además volvía a casa de noche y con las manos vacíos. Que bajón. Pero subiendo la cuesta casi infinita que hay desde Paral.lel hasta mi casa me encontré con la solución.

¡Que suerte que tengo! Me crucé, por pura casualidad con una vieja pantalla de ordenador, de aquellas que ocupaban media mesa antes de que existiera el plasma y los LCD y además, lo mejor de todo, era toda mía. Sin dudarlo me cargue a brazos con ella y le di una sorpresa a mi novia. Me echo la bronca pero yo ya estaba dispuesto con el destornillador y alicates para verle las entrañas a esa maquina que estaba a la intemperie hasta hace poco por culpa de un desaprensivo que no recicla.