domingo, 2 de marzo de 2008

DIA 4

Vuelta al trabajo. Esta vez no solo me fui a la universidad con la pantalla maltrecha, ya que a primeras horas de la mañana encontré una vieja minicadena otra vez cerca de casa, no se si funcionaba pero era bastante curioso ver un cassette después de tantos años.


Antes de volver con Antonio lo que hice es contactar con el profesor encargado de el taller de vidrieras y pedirle consejo para ver si podiamos solucionar el asunto de la pantalla rota. Y me propuso una solución bastante fácil y sorprendente, me comento la posibilidad de comprar Loctite y poner sobre la superficie en concreto y esperar.

Menos mal, pensé, ya que a estas alturas del trabajo me esperaba que tenia que jugar con fuego y estar mil horas para pegar los trozos.


Como ese día el taller de forja estaba cerrado y no podía avanzar lo que hice fue adelantar otra parte del trabajo. La parte en la que se seleccionan los productos que meteré en la televisión y que formaran parte de los codos.


Lo que representaran los codos fue fácil de decidir. Como están un lado del otro y son simetricamente iguales pensé en que compitieran entre ellos. ¿Y que marcas son las que más representar este valor? En efecto, Cocacola y Pepsi. 2 marcas que ofrecen casi lo mismo pero que luchan casi a muerte para ocupar infinitos espacios de publicidad de todas las maneras posibles para atraer a los consumidores y que elijan su producto en vez de al otro.

Para hacer esto, como necesitaba rellenar un espacio bastante grande para ocupar en la malla decidí comprar una botella de Cocacola de 2 litros y otra de 2 litros de Pepsi, puedes imaginarte la cara que puso la cajera al ver mi selección.

Deje las botellas en casa para darle un sorpresa a mi novia cuando llegará de trabajar y me decidí a revolver mi propia basura para a ver que hacíamos con el contenido de la televisión.

Despues de buscar un poco escogí los siguientes productos: Un Actimel, un zumo de frutas mediterráneo de 2 litros, un batido de cacao del Dia, los tapones de las colas que acababa de seleccionar, un yogur del Consum y una bolsa de patatas fritas Ruffles. Todas ellas marcas que, en menor o mayor medida he conocido por publicidad que me ha llegado a casa en catálogos (Del Dia, el batido o Consum, el yogur) o por la televisión o carteles publicitarios (el resto de productos).


Muy bien, esto esta casi, casi. Ahora solo falta que Antonio me eche una mano y que la televisión pegue bien. A ver que pasa.



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